martes

04/Sep/07




Y me frustro por que siempre obtengo lo que quiero, y te quise y te tuve, me costó lágrimas hasta la costumbre, me costo peleas con el mundo y conmigo, por no aceptar el olvido como una opción, y fuiste mio y de nadie más, por muy corto tiempo, el cual sólo tú conocerás por que no importaba el beso, era mucho más que eso, eran palabras y sentimientos que yo jamás podría cambiar, por que nunca podría llegar a ese lugar en tu interior, ni siquiera creo que tú sepas su ubicación, jugaste con mi corazón, lo apostaste todo, pero bien sabemos que la casa siempre gana, entonces cual es el punto de apostar, te preguntarás, por que no importan las estadísticas en nuestra contra importa lo que aporta, a nuestras vidas el simple hecho de jugar, de saber que existe ese 'uno en un millón', obviamente siempre contando con la suerte, de ser más fuerte, de aguantar otro minuto, otra hora, otro año de éste acto, por que eso es un vil acto, ponemos nuestra mejor cara y esperamos lo mejor, lo cual no pasa, por que no somos ese indicado dentro del millón, y nos duele por que apostamos todo, pero estúpidamente seguimos esperando que ganemos, ese pequeño segundo en el cual dicen el número que escogiste y te sientes el rey del mundo, te quise, te tuve y te perdí, pero al mismo tiempo ninguna de éstas 3 afirmaciones parece correcta..


(Ésto es muy viejo, lo encontré por ahí)

No hay comentarios:

Publicar un comentario